¿Deberías esperar a alguien que no está preparado para una relación?

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Ésta es una situación muy común hoy en día en la escena de las citas. Conoces a un chico con quien pareces tener una increíble conexión. Se han estado frecuentando por un tiempo y todo parece ir bien. 

Hasta que por una inquietud tuya o por un simple acto de adelantarse, te comunica la tan temida frase: “no estoy preparado para una relación”. 

¡Qué momento! Es un asunto delicado, porque probablemente este chico ha comenzado a gustarte y es posible que sientas algo por él. 

Es fácil pensar que si esperas lo suficiente, las cosas cambiarán y todo se acomodará mágicamente. 

Pero, ¿es realmente así? Hoy te traigo las razones por las que, tal vez, esperar no es la mejor decisión y en qué contadas ocasiones sí podría valer un poco de esfuerzo.

5 razones por las que NO deberías esperar a alguien que no está preparado para una relación

esperar a alguien que no está preparado para una relación

1) Tu tiempo es demasiado valioso

Considero que el tiempo es uno de nuestros recursos más valiosos, y es justamente por eso que es vital elegir con conciencia en qué lo utilizarás. 

Ahora, imagina dedicar semanas, meses, e incluso años de tu vida esperando a alguien que no tiene claridad sobre lo que quiere contigo. 

Y lo que es peor, imagina permanecer esperando por él todo ese tiempo, y que al final te diga, que en realidad no quiere estar contigo. Imagina cómo eso te haría sentir. No sólo te sentirás herida por el desamor, sino que además sentirás que has desperdiciado una valiosa parte de tu vida.

Aprovecha la oportunidad para cultivar relaciones más sanas o a aventurarte en nuevas experiencias que te enriquezcan como persona.

Si eliges invertir ese tiempo esperando, caes en el riesgo de estancarte en un ciclo de incertidumbre. 

Quedarás a la merced de un hombre, que para ser sinceros, si no sabe si quiere algo serio contigo, probablemente no valga la pena. 

2)  No eres una opción, eres una prioridad

En el amor y las relaciones hacen falta dos personas que realmente deseen estar juntas. Que elijan al otro cada día y que definitivamente no estén pensando que tal vez podría aparecer alguien mejor. Y eso es lo que te está diciendo un hombre que dice que no está preparado para una relación.

Si uno de los dos no está seguro, entonces no es un verdadero vínculo, sino una situación desequilibrada. 

¿Es buena idea quedar en suspenso y ponerte en un lugar donde constantemente te cuestionas tu valor y lugar en la vida de alguien? Definitivamente no. 

Y aunque te quieran hacer creer que eres una “desesperada”, estoy aquí para derribar ese mito. Lo más natural es desear ser elegida, querida y valorada en una relación. Y si el otro no puede ofrecerte eso ahora, probablemente sea un indicio de que nunca lo hará. 

Tú mereces a alguien que te elija desde el principio. Que sepa que quiere estar a tu lado. 

Eres valiosa y mereces reciprocidad en amor y compromiso.

3) Esperar hace que te cierres a nuevas oportunidades

Esto es algo que hemos discutido con mis amigas hasta el cansancio. 

Estas con alguien que te gusta y piensas, ¿que daño me hace disfrutar al incorrecto hasta que llegue el correcto? 

Pero lo cierto es que inconscientemente estás enfocando tu energía y atención a esperar a alguien. Y de esa forma inconscientemente estás cerrando la puerta a otras oportunidades que podrían estar justo frente a ti. 

El mundo está lleno de personas increíbles, con historias fascinantes, personalidades atrayentes y deseos de establecer conexiones genuinas con otros. Pero al enfocarte en alguien que no está seguro de ti, te estás privando de la posibilidad de descubrir estas nuevas conexiones.

No digo que aparecerá alguien al instante, pero al liberarte del lazo de la espera, abres un espacio en tu vida para que entre lo nuevo. 

Te das la oportunidad de conocer, de ser sorprendida y, quién sabe, tal vez de encontrar a alguien que te vea y te quiera sin dudas ni peros.

4) El desgaste de la eterna pausa

La cruda verdad: mantener tu corazón en una pausa constante esperando a alguien que no sabe lo que quiere contigo puede ser realmente agotador. 

Es como quedarse atascado en el tráfico, viendo cómo el reloj avanza, sin saber cuánto más tendrás que esperar.

Cuando estás en esta situación, es natural sentir que tu energía emocional se va agotando. Cada “mañana” o “pronto” te desgasta un poquito más.

Y no solo eso, sino que también te sumerge en un mar de dudas: ¿Seré suficiente? ¿Estoy haciendo algo mal? ¿Esperar tiene algún propósito?

La espera no es solo un desafío para tu paciencia, es una prueba para tu autoestima. 

Puede que algunos días te sientas fuerte, mientras que otros te encuentres cuestionando tu propio valor.

En este momento necesitas reflexionar sobre cuánto estás dispuesto/a a sacrificar emocionalmente por esa espera. 

5) Tu evolución personal no puede estar en pausa

Escuché hace poco una reflexión que me pareció genial. Era algo así como que tendemos a sobre proporcionar los queremos lograr en poco tiempo, pero a la vez subestimamos lo que podemos lograr en el largo plazo, como por ejemplo en 5 años. 

Lo cierto es que la cantidad de cosas que puedes aprender y lo que puedes crecer cuando no estás concentrada en alguien más puede ser realmente importante. 

Esperar a alguien que no está seguro acerca de una relación contigo, puede nublar tu capacidad de ver oportunidades para tu propio desarrollo.

Quizá hay cursos que quisieras tomar, viajes que te gustaría hacer o hobbies que te gustaría explorar. Pero como tu energía está en esa persona indecisa, no avanzas. 

Ya lo sabes, tu vida es aquí y ahora. 

El crecimiento personal es fundamental, y puede, de hecho, atraer a las personas correctas hacia ti cuando estás viviendo tu mejor versión.

4 situaciones en las que SÍ es prudente esperar: la diferencia entre pausa y estancamiento

Más allá de todo lo que hemos desarrollado hasta aquí, soy de las personas que saben que la vida no es blanco y negro. 

Siempre puede haber situaciones en las que podría tener sentido darle un respiro a la relación, pero es clave que ambos estén en la misma página. ¿Entonces, cuándo sería apropiado esperar?

  • En situaciones excepcionales: Hay ocasiones en la vida en las que las circunstancias externas (como un trabajo temporal en el extranjero, la muerte de un ser querido o una crisis personal) pueden requerir una pausa en la relación para enfocarse en superar ese obstáculo. Si ambos están dispuestos a apoyarse mutuamente y retomar la relación una vez superada la adversidad, es una razón válida para esperar.
  • Ambos están en la misma página: Si decides esperar, es importante que sea una decisión mutua. ¡Y atenta al auto-engaño! Que tus ganas de estar con él no nublen tu juicio, en el fondo sabes lo que deseas ahora. Si ambos están trabajando en su crecimiento personal, quizás tomándose un tiempo para enfocarse en objetivos personales o profesionales antes de sumergirse en la relación, la espera podría ser fructífera. Pero, en estas situaciones, es importante que establezcan límites y tiempos claros.
  • El compromiso es evidente: Esperar no significa siempre ser la segunda opción de alguien. Si la persona en cuestión está genuinamente comprometida contigo pero necesita tiempo para ordenar ciertas áreas de su vida (y no es simplemente una excusa), podría tener sentido ser paciente.
  • No sacrifica tu bienestar: Si decides esperar, asegúrate de que no estás poniendo en pausa tu propia vida y felicidad.  ¿Estás en una espera saludable y no en un estancamiento? Lo sabrás si puedes continuar con tu crecimiento personal, manteniendo abiertas tus opciones y cuidando tu bienestar emocional mientras esperas.

“No quiere nada serio, pero no quiere perderme” ¿Qué hacer?

Espero que en este punto tengas más claridad sobre lo que quieres y necesitas de esta relación. Ya conoces las razones por las que no deberías quedarte esperando a alguien.  

Si un chico te dice que no está listo para una relación, pero aún así desea mantener un tipo de relación “sin ataduras” contigo, es una señal de alarma. 

Esto puede llevar a sentirte atrapada en un limbo emocional. 

Lo primero que debes hacer es reflexionar sobre tus propios deseos y límites en la relación. 

No te conformes con menos de lo que mereces o buscas en una pareja. 

Habla con él clara y directamente; dile cómo te sientes y qué esperas del vínculo. 

Es la opción más rápida y directa. Si buscan cosas diferentes de una relación, lo mejor para ti es saberlo ahora. Así podrás hacer tu duelo y seguir adelante.

Estoy segura de que este chico te gusta mucho, de otra forma no estarías planteándote esperarlo. Pero te aseguro que hay muchos hombres más allí fuera. Hombres que tienen ganas de vincularse de formas saludables y recíprocas. No te conformes con menos. 

Establecer límites a veces es difícil pero es algo clave para nuestro propio bienestar emocional.

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Pamela Kirchheimer

Pamela Kirchheimer, creadora de Amate y Ama, ha impactado a millones con sus artículos a lo largo de los últimos años. Fundó este proyecto con el objetivo primordial de guiar a las personas hacia una comprensión más rica del amor, tanto para con ellos mismos como para con los demás. Su estilo de vida nómada le ha permitido vivir en diferentes rincones del mundo, brindándole una perspectiva enriquecida sobre cómo diversas culturas perciben y viven el amor y las relaciones. Esta amplia experiencia multicultural, sumada a su formación especializada en Coaching de relaciones, Desarrollo Personal, Profesional y Crecimiento Espiritual, forja su enfoque distintivo y holístico sobre el amor y las relaciones. Por consultas o de colaboraciones, puedes contactarla en k_pame@hotmail.com.

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