Todos sabemos lo que a un hombre le puede suceder cuando no ha quedado satisfecho en la cama.
Pero ¿sabías que las mujeres también padecemos esto?
Sí, has leído bien, ¡he escrito “padecemos”!
La frustración entre sabanas no tiene género, pero si estás perdido y no entiendes si ella está deseosa de seguir o no has cumplido sus expectativas, aquí te lo explicaré en detalle.
¿Quieres ser un buen amante? ¡Quédate a entender qué sentimos entonces!
Qué le pasa a una mujer cuando se queda con las ganas
Antes de develarte qué síntomas o actitudes te ayudarán a comprender si ella está satisfecha, déjame aclararte lo siguiente:
«tanto las mujeres como los hombres sienten deseo sexual.»
Ese mito de que solo los hombres tienen necesidad real de deseo sexual, es sólo eso, un mito.
¿Es un deseo sexual distinto? Puede ser. Pero ambos existen y son importantes.
Ante esto, un estudio publicado en Springer Link en Archives of Sexual Behavior indica que, los hombres experimentan un deseo sexual más elevado y estable que el de las mujeres y aclara que,
«el deseo de las mujeres fluctúa más que el de los hombres.»
Es decir que, puede cambiar. ¿Qué hace que cambie y no sea estable como el masculino?
El contexto en el que se encuentre y la capacidad afectiva de la pareja.
Así que, ya lo sabes, si quieres mantener la llama encendida, no debes descuidar la pareja.
Ahora sí, aquí te dejo 7 pistas para entender si ella aún quiere más y qué siente al respecto.
1) Frustración
¿Qué siente una mujer cuando se queda con las ganas? FRUSTRACIÓN.
Sí, igual que los hombres….
Si alguna vez has experimentado la frustración sexual, entenderás de qué hablo.
Ese deseo se mantiene despierto porque no ha podido liberar toda la tensión sexual acumulada.
Puede que incluso esta frustración se combine con impotencia, por no poder continuar o porque se ha terminado más pronto de lo que esperaba.
Es decir, el deseo aún está latente…
2) El deseo aún está latente
¿Sabías que quedarse con ganas no siempre surge de la falta de deseo en sí?
Se suele creer que, la mujer no está satisfecha porque no tiene ganas, es decir, no siente deseo sexual.
Por lo tanto, si ella queda insatisfecha, no es porque no ha sido un encuentro sexual de calidad, más bien porque ella nunca tuvo ganas de hacerlo en primer lugar.
Pero esto no siempre es así.
Que el deseo sexual se mantenga latente, quiere decir que ella tiene ganas aún, porque su deseo es más intenso que lo que ha vivido.
¿Tiene que ver con tu desempeño sexual en la cama?
No necesariamente.
Sino más bien que su deseo ardiente está vivo y le gustaría repetir o tener mayor intensidad en el próximo encuentro.
Esto suele suceder en el primer encuentro sexual.
Hay veces que el deseo previo es tan fuerte que, al concretarlo, uno se queda insatisfecho porque lo que tenía en mente y las sensaciones que despertaban eran mucho más de lo que se vivió.
Ya sea por timidez, falta de comodidad o complicidad, los primeros encuentros no son como lo imaginábamos y eso hace que nos quedemos con ganas.
Pero no siempre significa que uno de los dos no haya sido un buen amante.
Más bien que la situación no permitió explorarse en profundidad.
Y, naturalmente, es necesario ¡repetir!
3) Busca resolverlo
¿Suelen quedarse juntos o separados en la cama tras haberlo hecho?
Si ya han terminado la relación sexual y ella aún se queda en la cama, puede que no sea solo un descanso.
Mas bien te esté queriendo decir que está preparada para continuar la batalla. Te desea.
Obviamente la idea de que algunas mujeres disfrutan de mimos y caricias románticas tras hacer el amor, es real.
Pero sólo algunas. No todas somos iguales.
¿A qué prestarle atención entonces?
- Si se quedan juntos en la cama, y sus caricias parecieran ser “erotismo previo”. En otras palabras, si está jugando contigo para volver a calentarte: quiere más.
- Si eres de esos hombres que huyen de la cama despavoridos para ducharse o seguir con su vida, y ella se queda allí a solas un buen tiempo más…
Esto no es motivo de paranoia. Existe la posibilidad de que solo desee relajarse a solas tras estar contigo.
Pero también hay altas probabilidades de que se esté masturbando mientras te duchas.
Deberás descubrirlo…
4) Se siente vulnerable
Que una mujer descubra que se ha quedado con ganas de más, no es fácil.
Porque la hace sentirse vulnerable y enciende un sistema de alertas mental y emocional.
Es decir, mantener ese deseo despierto hace que se cuestione qué necesidades tiene realmente.
Y explorar no sólo su intimidad, sino la de la pareja también.
En este estado se revelan miedos y deseos ocultos, y esto puede resultar incómodo, pero al mismo tiempo liberador.
Por supuesto, esto no significa que quiera separarse.
Puede que descubra que necesita probar cosas nuevas y esto abra un nuevo capítulo en la intimidad de la relación.
No suena mal, ¿verdad?
5) Le genera inseguridad
A veces, que una mujer se sienta vulnerable le genera inseguridad.
Puede que ella tome esta situación como que es un problema personal, y no de la pareja.
Y se culpe a sí misma por “fallar”.
Incluso, hay mujeres que se sienten incomodas y se culpan por no poder relajarse durante el encuentro sexual.
Obviamente, si ella no logra relajarse y disfrutar, hay muy pocas posibilidades de que la pase bien y quede satisfecha.
¿Tiene que ver con la pareja?
Todo depende del vínculo que tengan y cuánta confianza posean entre sí.
Pero aquí te doy algunos motivos por los cuales podría no relajarse o conectar contigo:
- Se siente incomoda con su cuerpo: puede que se sienta fea o que su cuerpo le genere inseguridad a la hora de estar contigo y esto produzca que su mente esté en otro lado cuando estén juntos.
- Cree que es mala en la cama: a veces tenemos inseguridades por falsas creencias o porque alguna ex pareja nos ha dicho algo en el pasado que aún tenemos presente.
- Está pendiente de algún problema: si su mente está perdida en un problema importante que atraviesa, repercute en las relaciones sexuales.
- Stress: puede que esté atravesando un período laboral o emocional que le genere stress y no le permita relajarse.
6) Vacío emocional
Si tienes con ella una pareja estable, la frustración sexual puede sumergirla en una sensación de vacío emocional.
¿Por qué?
Porque esta situación le puede hacer sentir aislamiento y desapego en la pareja y esto puede filtrarse en otros aspectos de su vida.
Verás, quedarse con ganas de una manera rutinaria puede abrir dos caminos en una pareja.
- Como ya mencioné antes, la sensación de vulnerabilidad puede hacerla indagar qué nuevos caminos sexuales abordar juntos o
- convertirse en una carga pesada que contamina lo cotidiano, y puede generar descontento más allá de lo sexual.
Como sólo uno de los dos termina satisfecho, ella puede sentir que tienen una falta de conexión plena, porque no logran vincularse al 100% sexualmente.
Y esto puede erosionar lentamente su confianza en la pareja.
Es como que, cada vez que no lograran tener un encuentro sexual pleno, se generara una cicatriz invisible pero profunda que le despierte dudas acerca de la relación.
7) Siente que no son compatibles
Si ella es una mujer que se conoce en profundidad, es probable que sepa lo que le gusta en la cama y entienda lo que necesita.
Si algo no va bien con su compañero sexual, no se culpa, más bien identifica qué es lo que falla en la pareja.
Autoconocerse y saber qué es placentero permite que sea exigente con su pareja y esto puede resultar en que sienta que no son compatibles.
¿Tiene solución?
¡Claro que sí! ¿Cómo?
¡Conociéndose más!
Puede que los gustos o ritmos de ambos no encajen sexualmente.
Pero eso no implica que no puedan entender qué necesita cada uno para poder disfrutar.
Sobre todo, si han comenzado a salir hace poco tiempo y sientes que ella te da señales de que le gustas.
Por cómo te mira o cómo se comporta cuando estás cerca…
La clave está en descubrir si hay voluntad de mejorar para seguir juntos.
Si es así, la comunicación y exploración son muy importantes para lograrlo.
Es hora de hablar y ¡explorar!
Ya sea que esté desgastada la relación hace un tiempo o que descubras que ella siente que no son compatibles sexualmente, hablar será parte de la solución.
Ten una charla abierta y sincera con ella.
Exprésale tus miedos y dudas para entender si lo que estás percibiendo es realmente así.
Si descubres que, efectivamente, están teniendo una desconexión en la cama, puedes preguntarle:
- ¿Qué es lo que realmente te mueve y te excita?
- ¿Qué es lo que te gusta o no te gusta al estar juntos?
- ¿Cómo podemos satisfacernos mutuamente?
Una vez que comprendan mejor qué sucede y cómo mejorarlo, es hora de explorar.
En medio de la frustración, la autoexploración y exploración en la pareja puede ayudar a descubrir nuevas facetas de su intimidad.
Y ayudarte a entender qué tanto le gustas a ella.
Anímense a conocerse tanto a sí mismos como a cada uno, descubran qué disfrutan y qué no.
Prueben sensaciones y cosas nuevas. Eso sí, siempre desde el respeto y el consenso de ambos.
Ahora sí, ¡a divertirse!
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